En el transitar de la vida se nos han ido impregnando una gran cantidad de ataduras que quizás en muchas ocasiones ni somos conscientes de ello y un día cualquiera de un año cualquiera uno comprueba que su mochila personal pesa en exceso ¿qué se puede hacer? algo tan simple, como descolgar la mochila de nuestra espalda, abrirla, mirar en su interior y comprobar el contenido. Si algo sirve colocalo a un lado, si no sirve colocalo al lado opuesto de lo que sirve y así hasta ver el fondo de la mochila. Sobretodo, que no quede nada dentro, porque si así fuera, quizás eso es lo que más pesa.
Cuando ya esté todo en el exterior, observalo, toquitealo (porque puede que fuese algo que estuviese al final de todo y ya ni recuerdas cual era su uso), intenta darle un sentido a tu vida actual y si no lo encuentras.... zasssss a la papelera de reciclado.
Una vez finalizada toda esta tarea, vuelve a guardar todo lo que es útil para tu camino actual, colocalo acorde a las necesidades prioritarias, cierra la mochila, cuelgatela de nuevo y reinicia el camino.
A que vas mas ligero!!! jajajaja..... es que en ocasiones, lo que nos sucede a todos es la pereza que nos entra en el momento de hacer limpieza de lo que ya no es útil y vamos acumulando y acumulando hasta darnos cuenta que nos asfixiamos con tanta acumulación.
Un abrazo y.... yo sigo con mi limpieza que no debo demorar más tiempo el reiniciar mi camino.
Africa
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