ARTISTAS

De bien pequeños ya nos iniciamos a vivir envueltos de arte. Lo sentíamos, lo modelábamos, lo coloreábamos y acabábamos dándole un toque final con una sonrisa incondicional. Y ese era nuestro trabajo en ese ciclo inicial, como base para crear la mejor obra maestra que existiera en el mundo NUESTRA VIDA.

Si se tiene claro, que el nacer no era nuestro inicio en la creación ya que veníamos con una historia tras nosotros "la historia familiar", ello no debía ser impedimento en un principio para poder ser los mejores artistas del mundo, indistintamente del entorno al que perteneciéramos. Si expreso esto, es debido a que los dones con que nacimos "el de artistas" no siempre fueron visibles para el entorno o si lo fueron, los descuidaron por la poca importancia que se les daba. Eramos niños, no otra cosa y por lo tanto ese doble protagonismo era el espacio necesario que cada uno de los artistas precisaba para poder dar forma a lo inimaginable. ¿Cómo? Jugando.

El jugar es el mayor modo de ser artistas y de pequeños sabíamos que era el mejor modo de crear una  obra maestra y sin rechistar lo hacíamos encantados. Soñábamos que volábamos, nos enamorábamos y dejábamos de hacerlo a la velocidad de la luz y todo valía, todo tenía sentido porque cada uno de nosotros sabíamos de nuestro arte. Incluso con los enfados, eran tremendamente coloridos, porque siempre resolvíamos nuestros más y nuestros menos de modo sencillo.

La obra siguió adelante, aún con creencias, castigos por atrevimientos desmedidos, por ensuciarnos la ropa cuando íbamos a salir con la familia pero aún así todo seguía tomando forma, porque nosotros no dejábamos que los enojos ajenos nos afectaran en exceso, simplemente transitábamos por aquellos estados alterados de nuestros mayores intentando comprender el motivo de que les sucedía a los mayores para reaccionar del modo que lo hacían cuando en sí lo único que estábamos haciendo era SER ARTISTAS.

La infancia divina, que grandes momentos si sabemos ver tras todo el dolor vivido, que en muchas ocasiones nos produjeron el ver el  gran colorido que le dábamos sin más. Pintábamos dibujos de casas donde los techos eran de diversos colores, árboles amarillos, rojos con grandes cerezas que colgaban de la nada ya que no habían ramas, cielos azules con nubes enormes de color blanco, soles anaranjados con miradas y boquitas sonrientes, caminos que llevaban a ningún lugar y flores quizás extremadamente grandes si las poníamos al lado de la casa ya creada, pero que tenía un sentido invisible de que debía ser así, ¿donde cabía en un dibujo una flor sin ojos y sonrisa? 

Llegado a este punto, si miramos más allá de la infancia, podremos comprobar que eramos felices aún en la adversidad de los momentos tristes, vivíamos sumergidos en una narración recién iniciada por nosotros que debía ser trabajada pero sin saberlo, aprendimos que la mayoría de los adultos habían dejado ya de ser artistas porque con sus acciones y enseñanzas nos aturdían en ocasiones de nuestra creación con aprendizajes que más que para vivir eran para subsistir y con ello hacer que la sociedad en la que transitábamos nos aceptará como uno más, .... hagamos una parada antes de seguir.

¿Estas enseñanzas de los adultos eran sanas? En cierta medida sí, ya que era la llave de entrada a la comunidad, aunque nosotros eso en la mayoría de ocasiones no lo comprendiéramos y de ello nuestras resistencias a querer crecer, porque ello supondría el dejar de ser ARTISTAS de nuestras propias vidas.

Pero como dice el refrán "No hay mal que por bien no venga" y eso es lo que todos debíamos haber aprendido, el comprender que el vivir en sociedad no debía ser un impedimento a seguir creando, a seguir jugando, a seguir pintando los dibujos al antojo de ese momento, y si eso hubiésemos hecho quizás en la mayoría de los recuerdos de nuestra niñez no tendrían tanto peso, porque por ejemplo, ¿Por qué el tejado de una casa debe ser rojo? ¿Y el tronco de un árbol marrón? ¿Y el cielo azul? Pues ahí fue el mayor error cometido con los grandes artistas que habían nacido a los que llamaban NIÑOS, el no dejar que su creatividad fluyera acorde a lo que vivían, y eso se hacía.

Muchos desistieron y se dejaros domar, otros no lo hicieron y son grandes sabios de la vida, porque no permitieron que su esencia se la truncasen sin más, quizás seguían trabajándola a escondidas para que no la mutilaran, crearon un artista invisible a los ojos adultos ... que gran sabiduría porque el hacerlo les llevo a poder seguir viendo la magia que existe más allá de la mirada humana, la que no se percibe si no miras con el alma y de esos hay pocos lamentablemente.

El arte de la vida, todos la tenemos, pero pocos saben trabajarla y mucho más a la vista de todos por miedo a que los llamen locos arrogantes de fantasías ilusorias donde todo es ficticio porque no saben comprender en el idioma en que se expresa, cuando en sí, ese era el  lenguaje que todos en un momento dado de nuestra vida reconocimos como único y que muchos olvidaron en el transito del camino recorrido.

La vida nos ofrece grandes cosas, pero todas llegan en pequeñas dosis, no porque no las merezcamos, sino porque en lo pequeño está la esencia de lo divino y si uno aún siendo adulto no perdió su don de ARTISTA si su curiosidad se le deja fluir podrá ver toda la gran magia que todo encierra. Si se consigue verla, la vida volverá a tener un sentido sin sentido porque todo tendrá cavidad y no se precisará de paciencia, ni de voluntad, ni de bondad, ni de trabajar el desapego, porque todo eso y mucho más ya está en la magia del momento, es entrar en un "punto cero" donde el espacio y tiempo se para, uno deja de tener cuerpo, solo se es y nada se precisa porque todo se tiene.

El entrar en el arte de la vida, es comprender que el amor siempre está presente, se nos da en todo momento del mismo modo que nosotros lo damos aún sin darnos cuenta, es... algo mágico. Es por ello, que yo amo la vida, como a todos los que forman parte de ella, porque la vida soy tu reflejado en mí. Que gran conexión y esta es la demostración que de pequeños sabíamos y por ello siempre sonreíamos de que NUNCA ESTAMOS SOLOS, PORQUE FORMAMOS PARTE DEL TODO.

"El mundo está lleno de pequeñas alegrías:

el arte consiste en saber distinguirlas"

Li Tai-Po

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"Los espejos se emplean para verse la cara;

el arte para verse el alma"

George Bernard Shaw

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"El arte es una mentira

que nos acerca a la verdad"

Pablo Picasso

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"Arte no es representar lo bello, 

sino bellamente las cosas"

Pilar Avivar

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"Si se me pidiera que definiera 

en pocas palabras el término arte,

lo llamaría la reproducción 

de lo que los sentidos perciben e

n la naturaleza a través 

del velo del alma"

Edgar Allan Poe

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"El hombre dotado de inteligencia 

puede con el don de saber que posee,

conseguir la capacidad necesaria

para toda la técnica y destreza artística"

Kazimierz Brandys

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"El arte nace en el cerebro

y no en el corazón"

Honoré de Balzac

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"Crear es tan difícil 

como ser libre"

Elsa Triolet

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Un abrazo

Africa