jueves, 6 de diciembre de 2012

EL ÁNGEL QUE PERDIÓ LAS ALAS SE ENCUENTRA CON LA CLARIDAD...

El ángel camino hacia las profundidades del bosque hasta que ...

... vio al fondo del camino algo parecido a una luz. Se apresuro a descubrir de que se trataba ya que su curiosidad la dominaba.

Tal y como se iba acercando, pudo comprobar que la luz provenía de una casa, se acerco y observo por una ventana desde la que tenia acceso.

Se sorprendió al ver que en el interior no había nada, ni muebles, ni libros, ni siquiera personas, pero lo que si había era una bombilla con luz que alumbraba todo su interior.

Por un momento, llego a pensar que era extraño haberse encontrado con una casa en mitad de su camino en la profundidad del bosque en aquellas condiciones, pero al mismo tiempo alguien debía vivir en ella aunque solo fuera por la luz encendida.

Era un misterio para ella ya que era la primera vez que se encontraba en todo el trayecto de camino realizado con algo semejante.

El ángel que perdió las alas decidió indagar más sobre si había alguien dentro y se preparo para que en cualquier momento alguien saliese a su encuentro.

Dio una vuelta a la casa esperando encontrar por donde acceder. En cuanto la encontró pico con los nudillos a la espera de que alguien contestará o abriera la puerta, pero eso no sucedió.

Abrió y .... vaya sorpresa!!!!

En su interior la luz que parecía de una bombilla, era muchisimo más amplia y luminosa. En un principio le dio reparo entrar ya que no sabía que se podía encontrar, pero su curiosidad la llevo a hacerlo.
 
Cuando ya estaba en el interior se impregno toda ella de esa bellisima luz que tal como se iba filtrando hacia su interior le otorgaba una paz que hacia siglos no había podido encontrar en ningún lugar.
 
Miro a su alrededor y en otra estancia pudo ver algo que se movía y allí que fue a descubrir que era.
 
Entro y vio a un gato negro, sus ojos brillaban con intensidad y si lo miraba atentamente le dio la sensación de que algo le decía.
 
El gato viendo que el ángel que perdió las alas le escuchaba, se atrevió a hablarle en palabras.
 
- Buenas noches ángel!!! dijo el gato
 
- Hola gato!!! dijo el ángel.
- ¿Cómo es que está esta casa aquí perdida en medio de las profundidades del bosque? se apresuro el ángel a preguntar.
 
- No está perdida, está donde debe estar. Contesto el gato un poco enojado.
 
- Huy!!! perdona, no quería ofenderte, respondió el ángel.
 
- No tranquila, si no me enojaste, simplemente fue una respuesta aclaratoria.
 
- Aaaahhhh vale!!!
- Entonces según tu está en el lugar que le pertoca estar. Pero que sentido tiene una casa con solo una bombilla (vista desde fuera, claro está).
 
- Eso viste?
 
- Sí, solo vi eso, en cambio cuando entre vi que era distinto, todo era más iluminado y brillante así como ya no lo veía desolado, es decir, la falta de muebles y demás, no daban sensación de desalojo.
 
- Bien!!! contesto el gato, pocas personas pueden apreciar lo que tu estas diciendo.
 
- Y eso? está claro que es así ¿no?
 
- No!! no tiene porque, ten en cuenta que un mismo interior de una casa pueden apreciarse de diferentes maneras, habrá quien se fijará en los muebles, otros en las cortinas, otros en la distribución, pero tú solo pudiste ver la luz, nada más y eso ya es una gran hazaña ya que ¿quién te dice que no hay muebles, ni cortinas, ...? quizás tú las sacaste de tu punto de visión, quizás la distribución, muebles y demás no sean tan necesarias para sentirte cómoda y sentir el calor del hogar.
 
- Quizás sea eso!!! respondió el ángel. Pero.... (dijo)
 
- Dime ángel, dime que estás pensando, tengo una gran curiosidad por saberlo.
 
- Realmente hay muebles, es que yo no los veo y la verdad, me inquieta no ver algo que está. expreso el ángel preocupada.
 
-  Pues esperaba que me dijeses eso, verás ángel, no todo tiene que ser visible para todos, lo interesante es que lo que veas te sirva para seguir tu camino, lo demás no deja de ser piedras que pueden llevarte a oscurecer tu modo de ver, es decir, que no veas unas cortinas, no veas unos muebles, no es importante y sabes porque? porque no dejan de ser vestidos para hacer algo que por si solo ya tiene su propia luz y su propio calor, como es esta casa, tu no lo necesitas, con tus comentarios me demuestras que con ver la luz ya tienes suficiente y es por ello que es lo único que has visto, has dejado de lado todo lo que no te sirve y eso ya es un gran paso.
 
- Ten en cuenta, que esta casa lleva aquí siglos a la espera de viajeros en busca de su propio destino, y la mayoría de ellos acaban queriendo quedársela, porque lo que ven desde misma ventana que tu miraste los embriaga, los domina hasta que comprenden que este no es un lugar para vivir, al menos que seas gato.
 
- Pero tu viste algo que pocos han visto y me alegro el haber podido estar aquí para presenciarlo, estaba a punto de salir a cazar cuando te vi mirando por la ventana.
 
- Así que tu me viste? dijo el ángel.
 
- Sí, pero precisaba saber si querías entrar y me alegro de que lo hayas hecho.
- Por cierto, que haces por estos caminos?
 
- Voy a casa del mago que calienta las piedras con el sol y al lanzarlas al aire se convierten en cartas adivinatorias. Tú sabes donde puedo encontrarlo?
 
- Si, ya no te queda mucho camino por recorrer, debes coger el camino por donde viniste y fíjate en el horizonte verás una montaña tras ella encontrarás al mago.
 
- Gracias!!! respondió el ángel con una sonrisa.
 
- De nada!!! estamos para servir.
- Porque no te quedas a pasar la noche aquí, en estas profundidades del bosque donde el sol casi no aparece el frío acaba dominándote, y teniendo claro que ya no te queda mucho trayecto hasta tu destino, sería divertido compartir una noche en compañía.
 
- Vale, de acuerdo pero debo salir en cuanto amanezca. Si de aquellas casualidades el sueño me domina, por favor, despiertame ¿lo harás?
 
- Si, claro confía en mi. Ahora mira a tu alrededor y busca una cama donde dormir.
 
- Vale!!! Andaaaaaaa!!! y como lo hiciste???? Hay muebles y cortinas y .... una gran cama acolchaditaaaa.
 
- Pues venga, estirate en ella y descansa tu cuerpo y deja que tus sueños te guíen en este viaje.
 
- Gracias gato!!. Pero, antes de irme a descansar, dime.... ¿cómo lo has hecho?, los muebles no estaban ahí.
 
- Yo no he hecho nada, tu lo hiciste. Es decir, vemos según tenemos necesidades, cuando no las tenemos aunque existan no las precisamos y por tanto las dejamos de apreciar, es eso, simplemente.
 
- Ahhhh, entonces fue eso lo que sucedió? gracias por acogerme, me voy a descansar, buenas noches.
 
- El gato se puso a los pies de la cama, junto al ángel a la espera de ver flotando en el aire los sueños del ángel caído.
 
- Y de pronto, el gato oyó un ainsssss!!!
 
- Y observó que el ángel en su bolsillo llevaba a "sonrisas" un personaje muy conocido en este bosque, pero.... ssshhhhh el ángel no debe saberlo, es por ello que de momento silencio, no vaya a despertarse y no pueda dormir más.
 
Seguirá...
 
Un abrazo
 
Africa

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