La gente corriente
esconde grandes historias,
que en la vejez son contadas,
a las cuidadoras,
cuidadoras de sueños fallidos,
y que acabaron en el olvido.
La vejez nos denota,
que ya nada se pierde,
que ya nada se gana,
y este efecto, es el que causa
el explicar las grandes historias.
Historias secretas,
historias guardadas,
anhelos y experiencias pasadas,
que son huellas del olvido,
si no fueron realizadas.
Y estas historias contadas,
vividas y anheladas,
de nuevo seran guardadas
en el baúl del recuerdo
para jamás ser olvidadas,
ya que son huellas vividas
por estrellas iluminadas.
Africa
Esta poesía la dedico a todas estas almas iluminadas que en el plazo en que trabaje en residencias de ancianos me fueron contadas, la mayoría no fueron realizadas tristemente.
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