
En el transcurso de la aventura, el ángel que perdió las alas comprobó que su amigo del alma había aparecido en algunas ocasiones y en otras por arte de magia había desaparecido, pero siempre sintió que la conexión seguía latente en el espacio tiempo, y que lo único que habían hecho era llevar caminos paralelos donde en ocasiones se cruzaban y en otros se separaban. Sonrió al tener este pensamiento y se dejo llevar por la maravilla del paisaje disfrutando de la compañía de sus amigos a los que amaba desde lo más profundo de su alma.
Por un segundo empezó a sentir que aquella aventura estaba finalizando, se puso nostálgica, ya que se sentía cómoda con ellos, decidió no pensar y disfrutar ya que eso es lo que siempre le acompañaría en su andar, la felicidad del momento vivido en plenitud.
Su amigo se acerco y le pregunto si le pasaba algo a lo cual el ángel que perdió las alas lo miro y sonrió sin mediar palabra, no quería adelantar acontecimientos, no era necesario.
Como bien le dijo gato, tras la montaña encontraron la casa del mago y al verla se apresuraron a acercarse con prontitud, ya que el viaje había sido enriquecedor pero extremadamente largo.
Al llegar a la explanada donde la casa se encontraba, el ángel le pidió a su amigo del alma el mayor favor que podía pedirle a nadie. Él con ojos de asombro, la escucho atentamente lo que le estaba explicando.

El amigo, se impresiono de la belleza de la llave y le sorprendió que el ángel confiará en él habiendo vivido momentos de soledad y de adversidad. La miro y le dijo:
- Ángel es una gran responsabilidad la que me otorgas, que pasará si la pierdo?
- Pues guardala en un lugar donde sepas que jamás se extraviará. Le contesto.
El amigo fue a guardarla en su bolsillo, cuando con su mano se encontró con la caja azul que "ingeniosa" le había regalado.
- Ángel, te prometo que no se estraviará,¿ sabes donde la voy a guardar? en la caja azul junto a la mía. Si se pierde una se perderá la otra y bueno, eso querrá decir que así debía ser. ¿No crees?
- Ángel le sonrió y le dijo. ¿Me enseñas tu caja azul? Soy curiosa y no se como es. jajajaja
- Claro que sí, sin ningún problema, puedes abrirla y observarla si quieres.
. El ángel que perdió las alas extendió sus dos manos para que la caja no se le callese. Con cuidado la abrió y observo el nuevo orden que su amigo le había dado. Frutos del mar y piedra con forma de corazón en el centro y cruzado entre ambos por debajo la llave que le ayudo a abrir la puerta del árbol de la duda.
- Que simbólico!!! El nuevo orden es perfecto, el crecimiento y el amor son la llave perfecta para llegar al destino. ¿Dónde piensas situar la que te entregue? le dijo el ángel que perdió las alas mientras dibujaba una sonrisa enorme.
- La cruzaré entre los Frutos del mar y la piedra en forma de corazón en el centro por encima pondré la llave que me entregaste y que nos ayudo a no quedar encerrados eternamente en el árbol de la duda.
- Me parece perfecto CHAMAN.
- Y porque me llamas así? porque has sido el único que has conseguido que aprendiera de la magia y la aplicará a la aventura que está a punto de finalizar. Tú en la distancia siempre fuiste fuerte y en el silencio me hablabas.
- Gracias ángel!!!. Me encanta tu amistad.
- A mi también la tuya!!!.
Después de haber guardado la llave del destino del ángel que perdió las alas, el ángel le pidió que la esperará sentado en una roca ya que debía aprender del mago algo importante y que precisaba estar a solas con él ya que según le habían dicho los ángeles que custodiaban sus alas, debía escucharle atentamente y después aplicarlo a su vida.
Al llegar a la casa, el ángel se asombro al ver un mago bonachón, alegre y despreocupado.
- Hola!!! dijo el ángel
- Hola Africa, dijo el mago sonriendo, te estaba esperando.
- Lo se, pero las aventuras del camino me llevaron a retardar la llegada, espero que no te molestase.
- Noooo!!! la cuestión era que vinieses y solo podía suceder en su momento.
- Gracias!! Sabía que lo entenderías.
Conversaron un rato, y enseguida el inicio su enseñanza sobre como lanzar las piedras calientes al aire y que se convirtieran en cartas adivinatorias.
Pasadas las horas, el mago le pregunto si quería saber algo. A lo que el ángel le dijo que si.
- Me gustaría saber mi nombre.
- El mago sosprendido le dijo AFRICA, así es como te llamas y a lo largo del día así te estuve nombrando ¿recuerdas?
- AFRICA!!!! Es verdad.... me llamó Africa, gracias por recordármelo.
- Alguna pregunta más?
- Si, respondió AFRICA.
- Cual es mi identidad?
- El mago lanzo las piedras calientes al cielo y las cartas adivinatorias dijeron: DESTINO
- Wuauuuu mi identidad es el DESTINO.
- Si dijo el mago, tu identidad es el DESTINO.
- Gracias mago por darme claridad de quien soy y cual es mi identidad. Los ángeles que custodian mis alas me enviaron a ti y me dijeron que escuchará atentamente lo que debías expresarme y que lo aplicará a la vida.
- Me alegro de haberte ayudado.
Ambos salieron de la casa y se acercaron a CHAMAN quien Africa le dijo con una sonrisa en los labios.... CHAMAN volvemos a casa, lo que debía saber ya lo se, ahora todo lo que aprendí lo debo aplicar a la vida y doy fe de que recuperaré las alas perdidas.
- CHAMAN, le miro a los ojos y vio en su mirada su DESTINO. Se despidieron del mago y de "Sonrisas" que entre risa y risa, les abrazo y beso deseándoles suerte en el retorno a su mundo.
Africa y Chaman, iniciaron el viaje del retorno hacia su mundo.
De ellos, no se supo nada en mucho tiempo, pero la aventura que por aquel bosque mágico recorrieron todavía es hoy que se oyen ecos de sus voces, risas y juegos y en muchas ocasiones los habitantes del bosque se reunen para recordarlos ya que lo que vivieron fue tan mágico que para mantenerlo vivo precisan hacer fuego entre amigos y contar las pasadas historias, a la espera de que en algún momento vuelvan a aparecer dando vida y nuevos colores a la vida de aquel bosque.
Un abrazo amoroso para todos los personajes del cuento, porque en sí tienen vida aún en la fantasía.
Africa
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