La escritura un medio de sanación, en el que todos podemos usar como medicina alternativa de la que podemos obtener grandes mensajes de como nos sentimos, y que es lo que percibimos.
La escritura sirve para conectarse con la esencia de uno mismo y que dependerá de lo que se conozca para sacar la creatividad de ella ya que el modo de expresión es muy amplio y enriquecedor. La poesía, la novela, la prosa, las metáforas, los cuentos, relatos de vivencias.
Cada palabra nos expresará la emoción que en ese instante en que uno cogió la pluma, el bolígrafo o el teclado está impregnado.
Y de reflejo el mundo, lo no visto pero si percibido de lo que sucede, de lo que se acontece, sin siquiera plantearnos lo que estamos explicando, simplemente surge y cuando no es así es que algo está fallando.
El que escribe es un trobador que por medio de sus vivencias y sensaciones percibidas le transmite al mundo una situación vivida.
Sabiduría ancestral, escondida tras palabras que no todos pueden alcanzar a comprender con la mirada ya que la vida es un sueño y como tal, el mensaje se esconde entre líneas no escritas pero que si te fijas tu corazón podrá alcanzar a comprender.
Todos tenemos el don de la sabiduría escondida en nuestro corazón, solo debemos saber ser creativos y mostrarlo al mundo acorde a nuestra bendición otorgada en la luz de nuestro nacimiento y que va desarrollándose con el tiempo.
Comunicadores atemporales, que nos acompañan en nuestras historias más allá del espacio, más allá de la sociedad en la que nacimos pero que por el motivo que sea, precisamos expresar todo el gran simbolismo que nos proyecta la sociedad.
Un abrazo
Africa
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