La sociedad, me produce tal aburrimiento que por todos los medios estoy intentando no aislarme de ella, aún a sabiendas de que mi aislamiento no podrá ser total ya que soy consciente que tengo que cumplir con mis responsabilidades como ciudadana. No me siento parte de ella, jamás lo he sentido ya que mis ideales van en contracorriente con los que en la sociedad imperan.
Leo entre líneas las miradas de las personas que la forman y su tristeza y descontento es tal que me encogen el corazón de ver lo ofuscados que se sienten con lo que la propia sociedad les dicen deben hacer, y aún estando en desacuerdo hacen.
Escucho lo que expresan, sus palabras de ansiedad, sus miradas perdidas en los problemas, los suspiros desesperados de situaciones que ven venir.... es tremendo lo que proyectan y siento.
Es insultante esta sociedad con sus habitantes, es intolerante con sus habitantes esta sociedad en la que vivimos, constantemente nos expresan que no somos nada, que no tenemos poder, que no .... que no.... y que no..... y se lo creen, el pueblo se lo cree "triste realidad" cuando en sí es lo contrario quien esta al poder somos nosotros "el pueblo" ya que somos quienes decidimos en nuestro derecho como ciudadano al voto el otorgar el poder a quien decidamos y del mismo modo se lo podemos quitar, pero el pueblo está ciego, no lo ve.
Nuestros dirigentes son mediocres, seres sin principios que no sean los suyos propios. Son seres que ven al pueblo como muñecos de trapo sin ningún valor. Pero si reflexiono sobre ello me surge la siguiente pregunta ¿qué sería de ellos sin un pueblo? NADA.
Vivo en una sociedad donde lamentablemente no puedo expandirme, no me lo permiten, me hacen sentir diferente ante tanta miseria espiritual y si me dejo ver un poquito siempre hay alguien que acaba intentando apagar mi luz interior. Con lo fácil que es la vida y lo complicada que supone vivirla cuando uno debe interrelacionarse con el resto del mundo.
Me aburre la gente, me aburre lo que la sociedad dice y hace.
No me gusta el mundo que hemos creado entre todos, porque no me proyecta nada que valga la pena por lo que luchar, nada por lo que tomar ejemplo y ser creativo para crear un cambio de visión ante todo el desorden generalizado que percibo.
Lo que expreso lo hago desde el corazón, me produce una gran tristeza y apatía lo que vivo y se vive a mi alrededor, .... estamos creando un desierto donde todo el colorido que le veía se convierte en gris oscuro.
La vida es bella por si misma y la sociedad es aburrida también por si misma.
Todo son lamentaciones, mentiras heredadas e hipocresias infundadas y todos otorgan aún no estando de acuerdo. Eso me entristece.... eso me lleva a la locura de encontrar ese vació en la soledad que estoy buscando desde hace tiempo, para poder llegar a un entendimiento y comprensión de lo que observo y escucho. El poder llegar a esta comprensión es la clave para poder seguir avanzando ante tanta desolación generalizada.
El mayor cáncer social "el poder". Los mediocres ansían tenerlo, poseerlo para codearse con toda la falacia social que el propio paquete de "poder" lleva consigo. El mediocre precisa del "poder" para sentirse diferente y seguir siendo alguien en una sociedad sucia y aburrida como en la que vivimos. Dominar al prójimo y sentirse único en una comunidad, sin darse cuenta que están muy equivocados.
El caminante hace camino al andar y no precisa poder alguno más que el suyo propio, ser único y auténtico es lo que marca la diferencia, y eso solo lo poseen los caminantes.
¿Qué se puede hacer para salir de tal aburrimiento social? No lo se, quizá lo que me esté pidiendo mi alma es un aislamiento social momentáneo para poder reflexionar sobre todo este asunto que si no comprendo me asfixiará en un futuro próximo.
Y todo lo escrito es debido a "que me aburre vivir en sociedad", han habido momentos en que he podido transitar por ella aún siendo juzgada por expresarme de forma diferente al resto, pero hoy eso no me sirve, ya nada me sirve, no quiero más juicios, no quiero más lamentaciones ni seguir bajo mentiras heredadas.... TODO ESTO YA NO TIENE CAVIDAD EN MI VIDA y eso me supone un problema momentáneo hasta que entienda y comprenda ...
Un abrazo
Africa
Estás muy cerca de entender y comprender, como tú misma has expresado al final de tu exposición. De hecho, creo que ya has entendido y comprendido muchas cosas. Me siento identificado con tus emociones. Hace unos cuantos años, por esas razones que expones, me fui aislando de la sociedad y "elevándome" hacia un mundo más espiritual, más objetivo en lo que concierne a la percepción de la falsa "realidad". Hubo un momento en que creí que ya no volvería a "vivir" en este mundo, en esta sociedad, en aquellas condiciones de entorno. Un día salí a pasear cerca del mar y de un jardín inolvidable por bello. Oré pidiendo amor, paz y luz para hacer lo que me condujera a mi estación de destino. Poco después me ofrecieron un trabajo importante que acepté porque simultáneamente concebí la idea de cambiar las cosas a nivel de una empresa. La ví como una célula clave para fermentar la sociedad que no me gustaba. Acepté el trabajo y me entregué a él. A sus empleados a todos los niveles. Llegaba el primero y me iba el último. Me preocupé de los operarios de fabricación, les daba los buenos días, les preguntaba algunas cosas relacionadas con su trabajo, les envíaba tarjetas con mi felicitación de cumpleaños, mandaba flores a las empleadas que acababan de tener un bebé, llamaba a los que estaban enfermos, organicé cursos de Formación en el Puesto de Trabajo y de la Calidad en el propio Puesto, tiré abajo los tabiques que separaban los "despachos". Generé buen ambiente y se me admitió como uno más. Las operarias subían a mi despacho (mi secretaria tenía instrucciones de dejar pasar a cualquier miembro de la empresa) y, emocionadas, me daban las gracias por mis pequeños detalles. La empresa cambió de "cultura" y además salió de la quiebra en un año. Mi balance fue y todavía hoy lo veo más claro: yo necesitaba amar y comprobar que dándome a los demás, sin renunciar a lo espiritual, debía entregarme, con amor, a aquello que sabía hacer. "Generar buen ambiente", "formar en Calidad", desarrollar las capacidades y talentos de los empleados añadiendo emociones sanas a sus trabajos, y a "Motivar", a sentirnos UN EQUIPO. El que hace sus tareas con calidad, con amor y mejora en sus relaciones laborales, sintiéndose importante en el desempeño de sus responsabilidades, experimenta una "alquimia" personal y "grupal" hacia la Calidad en general. Quién así cambiaba iba a mejorar también su convivencia en su casa, en su comunidad de vecinos, en su aldea, pueblo, ciudad, en su entorno. Y la reacción sería en cadena. ¿Qué es lo mejor que sabes hacer? Sé generosa, aparta tu egoísmo de aislamiento y entrégate al desarrollo de tus capacidades y dones, con amor, con mucho amor. Parece que tu capacidad de amar te desborda, pues cede amor a otras personas y serás "un Oasis en pleno Desierto". Un beso. Francisco
ResponderEliminarOoooohhh Francisco me conmovió enormemente tu comentario, solo puedo decirte que tus palabras me han proporcionado un rallito de esperanza en que todos estamos en el mismo barco, tu sentir pasado lo vivo yo ahora y tú me ayudaste a comprender que todos vivimos situaciones semejante y que el hecho de saber que alguien lo vivió da sentido a que el camino es el correcto. Quizás alguien en un futuro lea esta publicación y nuestros comentarios y se sienta igual que arropado por ellos como me siento yo en este momento con el tuyo.
ResponderEliminarGracias compañero de camino por cruzarte conmigo.
Un abrazo amoroso
Africa