LA VIDA ES UN CAMINO DE IDA Y VUELTA

La vida es un camino de ida y vuelta y en el tránsito la experiencia nos hará ver lo acertados o desatinados que hemos sido con nuestra vida.

 

Cuando nos equivocamos y somos conscientes de ello lo mejor es rectificar la actitud, para poder dar cavidad a esta experiencia siempre desde la humildad.

 

Cuando acertamos y nos alegramos de ello, lo mejor es seguir en el equilibrio interior de nuestra alma, para poder dar cavidad a esta experiencia siempre desde la humildad.

 

La humildad es nuestro mejor aliado para los aciertos y desatinos ya que nos da luz y claridad en todos los sentidos.

 

La humildad es la medicina idónea para un ego expandido por una sociedad consumista, neurótica y obstinada en ofrecernos lo que en ella no podremos encontrar.

 

La humildad es la luz del alma, escondida en la vanidad incesante de una vida vivida a toda prisa sin escucharla y sin permitir darle entrada por miedo a ser juzgado de forma errónea por el prójimo.

 

Si en los inicios de nuestra vida vamos aprendiendo a ser conscientes de nuestros actos, en el retorno todo resultará placentero, porque los aprendizajes obtenidos nos llevaran a discernir sobre que queremos y que no, sobre que decidimos y sobre que es la vida en sí misma.

 

Si en cambio, desde los inicios hasta el retorno, seguimos en un mismo camino, donde el tránsito es sinsentido, posiblemente en el momento de retorno, todo lo que nos concierne seguirá siendo sinsentido.

 

Seamos sabios, no del mundo, sino de nosotros mismos. Si nos conocemos.... sabremos como funciona todo lo que nos rodea, porque TODO es UNO y UNO es TODO.

 

Abrete al mundo y podrás comprobar que el mundo está en tí.

 

Un abrazo

 

Africa